Salchipatas


Estas salchichas provocarán la curiosidad de los niños. Tened cuidado, ¡porque a veces de encariñan de ellas y no se las quieren comer!

Ingredientes:

- Salchichas de carne o vegetales.
- Jamón York o embutido vegano.
- Clavos de olor.
- Palillos.
- Tijeras.

Elaboración:

- Freímos las salchichas un poco en la sartén o las calentamos con el microondas.
- Las cotamos por la mitad.
- Les ponemos unos clavos de olor a modo de ojos (no se comen).
- Les envolvemos media loncha de jamón york a modo de faldita. Aseguramos la "faldita" atavesando medio palillo de lado a lado del jamón.
- Cortamos por la mitad otros dos palillos y los pinchamos como si fueran piernecillas y brazos.

¡Que aproveche!

Desafío para diseñadores de interiores: ¡quiero un salón sin tele!

Dentro de un tiempo, y cuando los niños sean un poquito más mayores, me he planteado redecorar mi salón. Empezaré por la pintura, cambio de sofá, vender el acuario esquinero vacío, poner una chimenea...

Busco y rebusco en catálogos de muebles; muebles caros y asequibles; firmas españolas y extranjeras... busco en Internet y tiendas de liquidación de carretera.

Es imposible. Todos los salones están diseñados para acoger en su seno a una protagonista indiscutible: la televisión. Muy bien, esto hace dos años me parecía lo normal y jamás me cuestioné otra cosa. Ahora es diferente: Ya no tengo tele. Quiero montar un salón donde los protagonistas seamos los humanos, mi familia, mis amistades. Crear un espacio de intercambio, de conexión humana, de relación. Dónde sea cómodo hablar y debatir entre nosotros y busquemos este lugar para leer, escuchar música... acercarnos entre nosotros: humano con humano, mascota con humano, mascota con mascota.

Todos los catálogos que ojeo tienen los sofás orientados hacia la tele. El mueble que acoje la tele también está diseñado para hacer más bonito el entorno de la tele. Si no hay tele ¿ya no tiene sentido este mueble? ¿Lleno la pared con cuadros? ¿plantas? ¿aparadores llenos de la vajilla de la abuela?


Incluso cuando te entregan tu nueva y reluciente casa, vacía e impoluta, encontramos en el salón y en la habitación principal los enchufes para la tele y la antena, indicando claramente la orientación que debería tener nuestro salón...

Yo tengo mi propia idea: orientar los sofás enfrentados unos a otros, o en círculo, o hacia la chimenea que un día construiremos. Grandes alfombras. Cojines por todas partes.

Por favor, si tenéis más ideas sobre cómo llevar a cabo este pequeño proyecto os agradecería que me lo comunicaseis. ;)

Tobogán de canicas



Nuestro tobogán de canicas asegura horas de diversión; ¡además pueden participar varios niños a la vez!

Materiales:

- Caja de cartón. He reciclado una caja fina, estrecha y alta.
- Pintura.
- Cutter.
- Grapas.
- Canicas.

Pasos a seguir:

- Con un cutter recortamos una de las caras de la caja y la reservamos.
- En la parte de arriba (en un extremo) cortaremos con el cutter un agujero por donde echaremos nuestras canicas tobogán abajo.
- Procederemos a pintar nuestra caja como queramos y con el material que nos apetezca.
- Con la cara de cartón que nos sobró antes, cortamos tiras que harán las veces de rampas.
- A cada tira le pintamos 3 rayas longitudinales (la parte central debería de ser más ancha que los extremos). Sobre estas rayas marcamos con cuidado con el cutter, presionando y cortando solo hasta la mitad del cartón. Esto nos permitirá doblarlo sin dificultad, para poder hacer las paredes de cada rampa.
- Ahora hay que pegar las rampas en la parte interior de la caja con cierta inclinación. Yo empecé con varios pegamentos, pero con el uso se despegaban rápidamente. Al final opté por grapar las rampas a la caja. Fue la manera en que más resistió.
- Ya solo falta apoyar la caja sobre la pared haciendo un pequeño ángulo sobre el suelo y... ¡lanzar las canicas! De una en una o todas a la vez. Nos encantó el sonidito que hacen las canicas rodando por las pistas...

Tobogán inspirado en: http://paramipequeconamor.blogspot.com.es/2011/12/hacer-tobogan-para-canicas-en-carton.html

Macetas con botellas de plástico




Antes de tirar vuestra botella de plástico a la basura de envases, acordaros de esta manualidad. De manera muy sencilla pasaréis una tarde agradable con vuestros hijos y les tendréis pendientes una temporada de la evolución de las plantitas. Aquí les enseñaremos la importancia de reutilizar objetos y el cuidado y cariño que requiere una planta.

Materiales:

- Botella de plástico. En este caso usé unas botellas de agua de 2,5 litros.
- Cuchillo.
- Cola blanca o loctite.
- Tijeras.
- Ojos para manualidades.
- Tapones de botellas.
- Pequeño trozo de plástico de un envase de colores, por ejemplo un envase de toallitas de bebé.
- Tierra.
- Semillas.
- Agua.

Pasos a seguir:

- Recortamos por la mitad la botella y conservamos el tapón. En este caso usaremos la parte inferior de la botella.
- Hacemos 3 agujeritos en la base de la botella con la punta de un cuchillo o un punzón, para que drene el agua de nuestra maceta.
- Pegamos con loctite o cola blanca los tapones de plástico a modo de ojos y nariz. Podemos pintarle encima a los tapones ojos con un rotulador para CDs o bien pegarle unos ojos que venden en paquetes para manualidades.
- La boca le hemos hecho recortándola del plástico flexible de algún envase y pegándola. Si la hacemos con papel se deshará pronto porque a veces le caerá agua.
- Rellenamos con tierra para plantas y ponemos las semillas. Yo he usado semillas de perejil y albahaca. Como son muy pequeñas hay que tener en cuenta que hay que enterrarlas muy cerca de la superficie, sino el plantón no tendrá fuerza suficiente para salir hacia arriba.
- Regamos despacio y en abundancia.

Nuestras macetas están inspiradas en: http://nuncamasaburrido.blogspot.com.es/2012/10/cabezas-de-pelo-verde.html

Avión con pinzas y palitos de helado



Materiales:

- Una pinza de madera.
- 3 palitos de helado.
- Cola blanca o Loctite.
- Alfiler.
- Cutter.
- Cartón.
- Tijeras.
- Pintura o rotuladores.

Pasos a seguir:

- Pintamos la pinza a nuestro gusto y con el material que queramos. En este caso lo hemos hecho con rotuladores.
- Pintamos los palitos de igual manera.
- Pegamos los dos palitos con la cola blanca o con loctite tal y como está en la foto.
- Para la cola hemos partido el tercer palito por la mitad y hemos redondeado el extremo con un cutter.
- Pegamos en la cola una de las dos mitades del tercer palito.
- Con el resto del palito que queda, recortamos con el cutter la forma triangular que completará la cola de nuestro avión.
- Pegamos las piezas de la cola en sus lugares.
- En una cartulina, pintamos y recortamos una hélice. La atravesaremos con un alfiler y pillaremos el extremo del alfiler con la pinza.

Nuestro avión está inspirado en: http://hacermanualidades.info/aviones-de-materiales-reciclados/

Puzzle personalizado con palitos de helado





En esta ocasión fomentamos el razonamiento lógico y la visión espacial.

Materiales:

- Palitos de helado (reciclados por nosotros mismos o comprados en tiendas de manualidades).
- Ordenador + Impresora.
- Guillotina o tijeras.
- Cutter.
- Pegamento de barra.

Pasos a seguir:

- Imprimir una foto que elijamos. La altura de la foto debe ser algo inferior a la altura de los palitos. Mi foto la puse con una altura de 10 cm. con el Photoshop.
- Cortar la foto con tijeras o guillotina.
- Poner todos los palitos muy juntos y muy bien alineados. Para alinearlos por arriba me ayudé empujándolos todos a la vez con otro palito.
- Poner pegamento en barra en la parte trasera de la foto.
- Pegar la foto con mucho cuidado sin mover los palitos.
- Darle la vuelta al conjunto palitos-foto y cortar con un cutter la foto por la separación entre cada palito. Procurar poner algo debajo para no dañar la mesa.

Puzzles inspirados en: http://laeduteca.blogspot.com.es/2013/07/manualidades-puzzles-con-palitos-de.html

Psicomotricidad fina con tuppers



Aquí mi hijo Héctor se entretuvo durante mucho tiempo con esta actividad.

El objetivo del juego es trasvasar todas las canicas hundidas en arroz a un tupper vacío, pero haciendo pasar las canicas por un agujero que realizamos en la tapa. Es un éxito asegurado.

Materiales:

- Dos tupper con sus tapas trasparentes (son ideales los que vienen con la comida a domicilio; después de jugar taparemos los dos tupper, si no aparecerán arroz y canicas por toda la casa :)).
- Arroz.
- Canicas.
- Cutter.

Pasos a seguir:

- Realizamos con el cutter un agujero en una de las tapas de tal manera que la canica pase un poco justa. El niño ha de apretar un poco la canica para que entre. El agujero hay que recortarlo con cuidado y despacio, porque las tapas tienden a rajarse.
- Rellenar el otro tupper con arroz y enterrar muchas canicas, que tendrá que rebuscar y pasar al tupper vacío.

Portafotos con bandeja de porexpán



Aquí hemos reciclado una bandeja que contenía un manojo de puerros limpios y la hemos usado para poner la foto de uno de nuestros gatos.

Materiales:

- Bandeja de fruta, verdura, carne o pescado, bien limpia y seca.
- Ordenador + Impresora.
- Cutter.
- Lámina de plástico transparente (opcional).
- Pintura. En este caso hemos usado ceras Manley.
- Celo.

Pasos a seguir:

- Pintar la bandeja con nuestra pintura favorita.
- Recortar con el cutter el fondo de la bandeja dejando un marco ancho.
- Imprimir una foto un poco más grande que el agujero que hemos hecho en la bandeja.
- Pegar con celo por detrás de la bandeja un plástico transparente (tipo transparencia), que va a proteger nuestra foto.
- Detrás de la transparencia pegar la foto con celo.

Portafotos inspirado en el libro de fichas de Art Attack.

Portafotos con blister de pastas


En esta manualidad hemos reciclado un blister de pastitas. Tiene como tres compartimentos diferentes y decidí que podría resultar interesante poner tres fotos de Noa en poses divertidas. Tiene un toque 3D, ya que entre las fotos y el blister hay un hueco, que lo hace interesante.

Materiales:

- Ordenador + Impresora.
- Pegamento de barra.
- Cutter o guillotina.
- Cartulina resistente de algún envase.
- Blister de pastas o galletas.

Pasos a seguir:

- Imprimir 3 fotos que se adapten a cada hueco del blister. Yo he utilizado Photoshop para adaptar los tamaños, y las tres fotos han sido impresas en la misma hoja.
- Pegar las fotos en cartulina y recortarlas a sangre con tijeras o guillotina.
- Hacer unas incisiones en el plástico del blister con un cutter e introducir unas cartulinas resistentes, recortadas como tiras a modo de cuerdecita de las que van a colgar las fotos.
- Pegar las fotos encima de estas cartulinas estrechitas.

Vivir sin televisión

Hace aproximadamente un año y tres meses que vivimos sin televisor. El día que la tele abandonó el salón y ocupó un rincón en el trastero siempre lo recordaré. Mi corazón latía con fuerza, como si estuviéramos cometiendo un delito, algo injustificado, difícil y tortuoso. Notaba como si la tele apagada me mirase desafiante y rencorosa, como pensando un "me las pagarás".

Unos cuatro años atrás, observé cómo mi hija mayor se comía sin chistar la comida que yo le metía en la boca mientras consumía imágenes en movimiento; fui consciente de que algo no iba bien. A partir de este momento todo fue a peor. La teleadicción de mis dos hijos era patente y preocupante. La relación familiar se veía resentida y enfermaba por momentos. El día a día consistía en un continuo negociar sobre cuánto tiempo ver la tele, si antes o después de comer, si antes o después de cenar, si antes de ir al cole o mientras merendamos.

Los límites se rebasaban constantemente y llegó un punto en que los llantos desmesurados y las riñas por apagar la tele eran diarios y absurdos. Mis hijos estaban enganchados a la droga más barata, poderosa y extendida que hay, y nosotros como padres éramos responsables de ello.

La decisión de echar la tele de casa no fue fácil. Yo tenía mis propios miedos. ¿Cómo gestionaría esos momentos en que todos necesitamos un poco de tranquilidad para hacer tareas tan sencillas como hacer la cena o leer un rato? ¿Tendría constantemente a mis hijos enganchados en las rodillas suplicando ver la tele mientras lidiaba con la sartén? ¿Qué pasaría en esos largos días de invierno de frío y lluvia?.

A pesar de las dudas lo hicimos. No fue un castigo. Mis hijos saben que la tele salió de casa porque enfermaba a nuestra familia, nos hacía estar enfadados y nos distraía de hacer cosas más interesantes, y así se lo hicieron saber a sus compañeros de colegio.


Ocurrió que la situación durante una semana fue mala, un síndrome de abstinencia durante el cuál había que ser fuertes y no cejar en nuestro objetivo. A partir de aquí surgió el cambio.

Paulatinamente los niños empezaron a jugar con sus juguetes y a relacionarse entre ellos. Pintaban, bailaban, saltaban y también discutían, pero interactuaban juntos, con nosotros y con el medio que les rodeaba de una manera activa. Descubrí que podía cocinar y depilarme sin demasiadas interrupciones. Solo me reclamaban en momentos puntuales para solicitar ayuda o cuando un conflicto se les escapaba de las manos.

Me tuve que adaptar yo también a la nueva situación. Ahora participo yo también con ellos ofreciéndoles actividades creativas, organizando en mi cabeza una pequeña planificación sobre cosas que podemos hacer y sitios donde podemos ir. Últimamente cocinan muchísimo conmigo y están aprendiendo un montón de cosas que les van a ser útiles en la vida. Apenas estuvieron un par de semanas reclamando la tele. Ahora solo se acuerdan de vez en cuando, pero sin malos rollos.

Y las tardes de invierno, con lluvia y frío las hemos solucionado con varios pares de botas de agua, chubasqueros y ropa de abrigo. Se divierten igual fuera de casa en invierno y en verano. Pisar las montañas de hojas del otoño y sentir un aguacero sobre el rostro les hace sentir vivos.

Por nuestra parte, no les negamos del todo los medios audiovisuales. Ellos saben que hay teles en casas de amigos y primos, y en estos lugares pueden verla. Todos los días disponen de unos 30 minutos de ordenador para ver los dibujos que ellos elijan. Son 30 minutos limpios, sin publicidad y escogiendo muy bien lo que quieren ver. Elegir un programa en el ordenador me parece más razonable que encender la tele y tragarme lo que me echen. ¿No os a pasado de dar la vuelta a todos los canales con el mando a distancia y pensar que todo era basura pero a pesar de ello no apagarla?.

Este año está siendo un tiempo de mucha actividad creativa. Realizamos juntos un montón de objetos y juguetes que requieren de habilidades que cada vez se van perfeccionando más y más. Introducimos conceptos con material Montessori y cada día disfruto más de hacer cosas junto a mis hijos.

En este blog y a petición popular, recogeré algunas de las cosas que vamos haciendo para que os den ideas en esos ratillos de aburrimiento. Muchas cosas están sacadas de Internet, personalizadas y otras son creaciones propias o de mis hijos. La mayoría de los objetos no necesitan de mucha explicación; me gusta que sea muy sencillo y que se entienda sólo con la foto cómo hay que hacerlo.

Desde aquí agradezco a toda la gente tan creativa que está detrás de la pantalla del ordenador y que nos ofrece sus conocimientos para que podamos disfrutar de ellos. Según el tiempo que tenga disponible, añadiré los enlaces que considero más interesantes y que me han servido de inspiración dedicados a las manualidades.